La organización de la boda no es tarea fácil. De hecho, muchas novias se estresan solo de pensarlo. En LSC queremos que te relajes y disfrutes de este proceso. ¿Cómo? Con una serie de consejos llenos de cariño que te ayudarán a no perder los nervios. Atenta.
[/et_pb_text][et_pb_code admin_label=”PUBLICIDAD – ESPACIO (3) ANTES DE H2″][icswDoubleclickShortcode identifier=”Espacio-3″ size=”300×300″ identifier-mobile=”Espacio-2″ size-mobile=”300×300″][/et_pb_code][et_pb_text admin_label=”TÍTULO H2 Y TEXTO BLOQUE 2″ background_layout=”light” text_orientation=”left” use_border_color=”off” border_color=”#ffffff” border_style=”solid”]Consejos para sobrevivir a la organización de la boda (BY LSC)
- Haced vuestra boda como queráis: esta es la primera regla a la hora de organizar una boda. Es evidente que tanto la familia como los amigos querrán aconsejaros, pero no debéis olvidar que es vuestro día y de nadie más. Lleváis mucho tiempo pensando en este momento y por fin ha llegado. Tenéis todo el derecho del mundo a tomar vuestras propias decisiones y a organizar cada detalle de vuestra boda. Eso sí, esto no quiere decir que debáis rechazar los consejos de la gente que siempre os ha acompañado. Simplemente recordaros que cuanta más libertad os toméis a la hora de tomar vuestras propias decisiones, mayor será la alegría con la que recordéis vuestro día.
- Boom de emociones: consejo dedicado a las futuras novias. Feliz, agobiada, plof o entusiasmada. Una montaña rusa de emociones. Así es como te vas a sentir durante el proceso de organización de la boda. Habrá días en los que incluso dudes de tu capacidad organizativa y otros en los que estarás pletórica. En los momentos de bajón no olvides que estás a punto de vivir uno de los días más felices de tu vida.
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- Se egoísta: no permitas que nadie te manipule a la hora de tomar decisiones. Habrá gente (familia o amigos) que quiera participar en cada una de las decisiones que tomes, pero no permitas que primen sobre las tuyas. Nadie os conoce mejor que vosotros mismos. No te sientas mal: en ocasiones hay que ser egoísta.
- Mantened los pies en el suelo: todas hemos soñado alguna vez con nuestra boda. Ojo, la importancia de ser realista es evidente y más aún si hablamos de la organización de la boda. Es necesario que mantengáis los pies en el suelo y conozcáis vuestras posibilidades. Eso sí, si algo falla o no sale como esperabais, no os derrumbéis. Esto no quiere decir que vaya a ir mal, simplemente diferente. Recordad: los cambios siempre son para mejor.
- Decidid las cosas juntos: chicas ¡no acaparéis! La boda es de los dos, por lo tanto, ellos tienen el mismo derecho que vosotras a decidir. Antes hemos dicho que debéis ser egoístas, pero esto no quiere decir que debáis serlo también con vuestro chico. Sois un equipo.
- Intenta estar relajada la semana de antes: no permitas que los nervios se apoderen de ti. Recuerda que debes llegar a la boda lo más descansada posible. Es necesario que duermas bien, que comas bien y que te tomes tus momentos de relax. Y con esto llegamos al último consejo.
- Tomaos un respiro: vale os vais a casar, pero esto no significa que debáis hablar de vuestra boda 24/7. Haced vida normal, salid a tomar algo, al cine, a pasear. O incluso podéis escaparos el fin de semana de antes a un hotelito rural. Disfrutad de vuestro últimos momentos pre boda y no os obsesionéis con la organización de la boda.
